Estoy en contra de los palos para selfies ¿Quieres saber por qué?

Visitando stonehenge vi la situación más absurda que puedes presenciar mientras haces turismo: tres amigas disfrutando del lugar y cada una con sus palos para selfies tomándose fotos solas y no era cosa de una sola foto, cada paso que daban paraban se hacían fotos con el palito en diferentes posturas y luego seguían otro poco para hacer lo mismo, así una y otra vez ¿Cuál era la idea de esto?

¿Para que quieres fotos de ti sola cuando estas con dos fabulosas personas al lado en lugar tan maravilloso? ¿No sería mejor quedar con ellas en las fotos o si tantas ganas tienes de ti, bien puedes pedirle a tus amigas que te hagan la foto y al menos así compartirías algo de tiempo con esas personas?
El tema es que estamos tan idiotizados con nuestros móviles y su conexión a Redes Sociales que estamos olvidando lo maravilloso de compartir y de pedir a un extraño algo tan simple como que te tome una foto.
[piopialo vcboxed=»1″]Grandes relaciones y personas se conocen de la simple expresión: «me tomas una foto, por favor»[/piopialo]
¿Cuándo esto de salir de turismo y pedir fotos a extraños ha dejado de ser chévere y se ha convertido en un circo donde todos tienen un palito y se hacen sus propias fotos?
No digo que los palos para selfies o Selfie Stick sean del todo malos, hay lugares donde no verás un alma y el palito te puede salvar para plasmar el gran momento. Así y todo, creo que se ha perdido la creatividad y sobre todo el compartir con extraños cuando se está de turismo, gracias a este maravilloso invento que ahora nadie parece capaz de dejar de lado.
Cada vez estamos más cerca de ese mundo donde nadie necesita del otro y cada uno se defiende como puede, aunque este rodeado de cientos de personas.
Cada vez estamos más cerca de sentirnos aún más solos cuando hay tantas personas con nuestras mismas ideas y pensamientos al lado nuestro.
Es verdad que muchos que nos toman «la foto» terminan tomando algo terrible e imprimible, pero a la final no importa, esa foto tiene una anécdota, una persona detrás que seguro te sacara una sonrisa al verla y eso es más de lo que puedes decir de la cantidad de malas fotos que te sacas con el famoso palo para selfies.

4 Razones por las cuales usar el palo para selfies

Porque dejas de depender de otros para tomarte una foto. Nada da más vergüenza que tener que importunar a una persona que no conoces para que te tome una foto y si a esto le sumamos que no hablas el idioma, más corte da acercarse y pedir un favor tan banal como este.
Porque aprendes a ser independiente y valerte por ti mismo y con ello tomarte cuantas fotos quieras de ti o de tu grupo de amigos.
Porque mientras te toman una foto, te pueden robar la cámara y ¿Qué haces en esos casos? y no es por desconfiar pero es que hay lugares donde en serio es peligroso pedir que te tomen una foto.
Porque puedes sacar fotos desde posturas imposibles, en lugares donde a veces no hay nadie a la vista que te pueda hacer una foto maravillosa.

4 Razones por las cuales no usar el palo para selfies

Porque dejas de compartir con extraños, conocer personas durante tus viajes y practicar un nuevo idioma de una manera distendida.
Porque te ves realmente ridículo cuando estás solo con ese palito y tratando de posar de manera absurda en un lugar lleno de gente que te podría sacar una foto mucho mejor.
Lo que hace todo el mundo no siempre es lo mejor, a veces se puede ser mucho más original sin hacer lo que todos hacen y siendo de la vieja escuela.
Porque estás perdiendo la capacidad de ser creativo, de usar la imaginación y de hacer las cosas de manera diferente a los demás.

Conclusión y reto

Aunque no estoy de acuerdo con este invento y sobre todo su masificación, creo que utilizar sabiamente los recursos que se tiene puede ser una buena estrategia. Las selfies son una moda, son divertidas y se pueden hacer grandes tomas. Esta moda seguro pronto pasará y vendrá otra cosa, pero por ahora es lo que hay.
Si eres de los que siempre quiere una selfie porque sí o de los que usa el palito porque lo cree mucho más cómodo y que saca mejores fotos, bien por ti, sigue disfrutando de lo que te haga sentir bien.
Si en cambio eres más de pedirle a extraños que te tomen fotos o de poner la cámara o tu móvil en lugares originales para poder sacar «la foto», genial también. Activar la creatividad o tus relaciones públicas siempre será algo positivo para tu vida.
Sin embargo, deja de preocuparte porque todos tienen un palito y tú no. Si no posees un palo para selfies no es el fin del mundo, de hecho puede que tengas mucho más que el que tiene uno y aún no te has dado cuenta o peor aún olvidas disfrutar de ello.
Por eso para finalizar, te invito a que te apuntes a uno de estos retos y hagas algo diferente hoy:
Vayas al lugar más turístico del lugar donde vives y observa a la gente y dime ¿Cuántos ves con palos para selfies? ¿Cuántas de esas personas que ves con el palito están juntas? ¿Te gusta lo que ves?
Si tienes palito te invito a que por un día, por una salida, no lo uses y le pidas el favor a varias personas que te tomen las fotos que quieres. Luego dime ¿Fue tan terrible pedir el favor? ¿No te gustó las fotos que te tomaron? ¿Hubo algún tipo de conexión con las personas que te tomaron las fotos?
Si tienes palito selfie ve solo a un lugar turístico y tómate cuantas fotos quieras. No interactúes con nadie, no pidas que te tomen fotos y mucho menos tomes alguna. Eres tú y tu palito «puede con todo». No necesitas de nadie más.
Sal a un parque con tu cámara y tómate fotos. No selfies. Sin trípode, sin palito selfie. No le pidas el favor a nadie que te tome la foto, usa tu imaginación, se creativo y saca la mejor foto de tu paseo.

Ahora bien, ¿Cuál de las cuatro opciones disfrutaste más? ¿Crees que exagero al decir que nos estamos volviendo más impersonales al usar los palo para selfies? ¿Creamos un hashtag para que compartamos las fotos en Instagram?

PD. Había olvidado mencionarte esta campaña que ha lanzado el Ministerio del Interior de Rusia sobre el uso inapropiado de los palos para selfies: «Un selfi ‘guay’ puede costarte la vida»