Controles rutinarios

Entiendo que ir al médico para muchas personas pueda ser toda una agonía.
Pero lo cierto es que es un mal necesario y lo mejor es hacernos controles con cierta regularidad.
Hay un dicho que dice: “es mejor prevenir que lamentar” y aunque sea molesto, doloroso, incómodo y en muchas ocasiones te sientas mal de solo pensar que tendrás que ir. Lo mejor es hacer el sacrificio y darte la pasadita por el médico.
Las mujeres debemos hacernos un control citológico después de los 25 años o cuando iniciamos nuestra vida sexual de manera activa, siquiera una vez al año.
Para muchas es un suplicio pensar en eso, pero lo cierto es que solo dura un par de minutos y nunca está de más cuidarnos y proteger aquello que tanto valoramos. Nuestra vida.
Para los hombres es más “fácil”, aunque se quejan de que el examen de la próstata es lo peor, el dolor es insoportable y mejor dicho te echan unos cuentos con tal de no ir… Me pregunto: ¿Pero de qué se quejan?
Es una vez al año después de los 40 años. Nosotros empezamos con la citología desde los 25 y algunas muchos años antes y que me dicen del periodo (ciclo menstrual) del cual padecemos mes a mes desde los 16 hasta los 55 años, más o menos.
Ellos no padecieron el dolor cuando te estaban creciendo los senos y mucho menos padecen el suplicio que es traer hijos a este mundo.
Entonces ¿de qué diablos se quejan?
Es que definitivamente los hombres son muy cobardes cuando de dolor se trata, pero ese examen tan molesto puede evitar muchos males futuros.
Así que, hay que dejar de chillar y pensar que es importante para la salud no solo tuya sino de tu pareja.
Mi recomendación del día es esa, ve al médico hazte los exámenes, cuida tu salud si quieres tener una vida sexual activa, saludable y duradera.
Empieza por cuidar aquellos órganos que más utilizas y no olvides que es un mal momento a cambio de un año de tranquilidad.