¿Una madre puede ser una buena amiga?
Hace poco alguien me dijo que una madre no puede ser la mejor amiga de sus hijos, que hay que marcar una línea. O eres amiga o eres su madre, pero no ambas.
Si eres amiga de tus hijos ellos nunca te respetarán y te tratarán como a uno más de sus “cuates” y nunca aceptarán un regaño o una “orden”, por lo cual es importante y necesario ser una madre antes que una amiga. ¿Crees que una madre puede ser una buena amiga?
Pensando en madres y amigas
Esto me dejo algo descolocada, porque mi madre es mi mejor amiga.
Sin embargo, esta persona me decía que es imposible, que era una ilusa y por ello estoy escribiendo esta nota, porque me he puesto a pensar en el tema y es verdad que a mi madre no se lo cuento todo, pero es que a nadie se lo cuento todo, todo.
Sin embargo, mi madre es aquella persona a la que recurro si tengo una idea, una duda, un mal día o un día genial.
Es con la que me encanta pasar el tiempo ya sea chateando, viendo una película o haciendo cualquier cosa sin decir nada.
Es aquella que siempre estará ahí para mi con una palabra de aliento o con un regaño sincero si he hecho algo mal.
También me puedo ir de rumba con ella, mis amigos la adoran. De hecho ahora que no estoy en casa la visitan a ella en algunas ocasiones, lo que demuestra que no solamente es mi amiga, sino que también es amiga de mis amigos y eso me parece genial.
Cuando quiero saber algo de alguna amiga, ella es la primera que va y averigua o la visita porque yo quería saber cómo está.
No tiene pelos en la lengua, es genial hablar con ella y no se corta ante ninguna cosa que le diga o le pida.
Esto para mi es amistad, pero también es firme cuando tiene que regañarme o regañar a alguno de mis hermanos. Porque sí, ya somos viejos, pero es nuestra madre y la escuchamos, la respetamos, le hacemos caso o discutimos con ella cuando no estamos de acuerdo.
Todos vemos en ella una amiga, una madre y sobre todo nuestra primera persona para cualquier situación que vivimos. Así que no entiendo por qué hay gente que te cuestiona cuando le dices que tu madre es tu mejor amiga.
Es verdad que no todas las madres son como la mía, si fuera así el mundo sería una fiesta, pero también es cierto que hay madres maravillosas, en las que puedes confiar y recurrir cuando necesitas amistad.
No entiendo porque no puede ser así. Claro que soy consiente de que hay madres que son terribles. Veo Mentes Criminales y CSI, además de otros programas donde muestran algunas madres que son realmente una porquería, pero no es el caso de todo el mundo.
Así que si ves una madre que puede ser una amiga, por qué no tomar esa parte de amistad que te ofrece, por qué cuestionar a alguien que te dice que su madre es su mejor amiga. El que tu madre no sea tu mejor amiga, no quiere decir que otros no tengan ese privilegio.
Así que, personalmente, si algún día tengo hijos, yo quiero ser como mi madre.
Una mujer que me alegra el alma cada día, que tiene mil historias que contar y que sabe sacarle provecho a la situación más chunga.
Ella da unos sermones que son mejores que una pela. Te hace reír con sus ocurrencias, pero sobre todo a pesar de los años y de lo que ha visto y vivido, aún tiene tanta inocencia y tanto amor que dar. Aunque ella seguro dirá que no es de esas.
Pues sí, hoy estoy enamorada de mi madre, de mi mejor amiga, de mi confidente y de aquella persona que para mi es la número uno, la que siempre saca lo mejor de mi y siempre tiene algo que me alegra el día sin importar el lugar donde me encuentre.
Si esa no es una madre, no es una amiga ¿Me dirás entonces tú qué lo es? 🙂
Creo que los padres deben ser eso, padre y madre, no amigos. Pero también creo que lo que la mayor parte de la gente cree que es un padre o una madre, no lo es.
Me explico. Un padre o madre no necesita ser autoritario. Es más, en mi opinión, no debería «mandar» sobre lo que hacen sus hijos. Tiene que ayudarles allí donde lo necesitan. Tomar las decisiones que ellos no pueden tomar, pero únicamente cuando no queda otra opción.
Lo que los padres sí deben hacer es contribuir a crear un entorno de confianza. Y esto es totalmente incompatible con mandar o que tus hijos te tengan miedo. Si tus hijos piensan que vas a juzgar cualquier cosa que hagan, que les vas a castigar o premiar, no confiarán en ti, no se abrirán. Aquí la palabra clave es respeto. Un post que publiqué al respecto: zolani.es/como-ser-buenos-padres
Muchos padres que han querido ser amigos, al final terminaron no siendo ni padres, ni amigos. Esto, por supuesto, no quiere decir que no puedas tomarte unas cervezas, decir tonterías o bailar con ellos. Cuestión de cambiar nuestra forma de entender la pa- o maternidad.
Adrián, creo que como dices cada padre o madre es diferente y cada relación que construyes con tus hijos también lo es. Hay muchas maneras de ser madre o padre, cómo lo seas es cosa tuya y serás tan bueno o malo como tus propias experiencias lo permitan. Hay muchas maneras de ganarse el respeto de tus hijos y el ser amiga de ellos no quita eso, aunque claro hay personas que no saben delimitar una cosa de la otra y ahí es donde vienen los problemas, al menos eso es lo que pienso según mi experiencia como hija, porque como madre aún no tengo 😀